Fuente: Fe y Alegría. – Entre los grupos más afectados en el ámbito emocional y psicológico, en el marco de la migración venezolana que ha ocurrido durante los últimos años, están los niños, niñas y adolescentes.

Según la psicóloga Alejandra Heredia, con la migración forzada “se rompe el vínculo emocional de un joven que inicia la vida, tras el desarraigo forzado de su patria, para iniciar su vida familiar en otro país o, por el contrario, ve a su familia partir”.

Dentro o fuera de Venezuela, el desarrollo psicológico y emocional de los niños se han visto vulnerados con estos cambios a lo largo del tiempo.

“Hay que prestar especial atención, las señales están ahí. Hay que fomentar espacios seguros, sin juicios y en tranquilidad para la resolución de conflictos en el hogar”, resaltó la experta en entrevista para el programa En Este País de Radio Fe y Alegría Noticias.

Para reparar vínculos en déficit con los jóvenes o miembros de la familia, Heredia sugirió que “hay que validar las emociones, buscar crecimiento en terapia y evitar caer en las crianzas de antaño, que eran autoritarias y dejaban secuelas de cuidadores presentes-ausentes”.

Además, destacó que con el ilimitado acceso al internet y a redes sociales, hay padres en el país, ávidos de información y que no pueden pagar el tratamiento psicológico de sus hijos.

“Esto puede jugar en contra, pues la sobreinformación a veces causa más caos. No hay que creer todo lo que se ve en las redes”.

El duelo de la partida tras la migración lo viven cada uno de los miembros de la familia involucrada de manera diferenciada, pues lo sufren quienes salen del país en busca de un mejor futuro, pero también los que se quedan en el país con un sentimiento que muchas veces no se gestiona correctamente.

Marco legal para niños, niñas y adolescentes

La psicólogo Alejandra Heredia también destacó que hay leyes que protegen a los menores venezolanos.

Heredia hizo referencia a la Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescente (Lopnna) como sustento jurídico para el manejo de situaciones conflictivas extremas en el hogar y otras áreas.

Aunque advirtió que “a veces fungen de escudo para aquellos niños que buscan irrespetar la autoridad y se puede convertirse en un arma de doble filo si no hay un uso adecuado”.

Verificado por MonsterInsights