En Venezuela no se dispone de cifras oficiales sobre la tasa de violencia contra la niñez. Sin embargo, según las estadísticas del servicio de atención psicológica de Cecodap, la violencia contra los niños en el contexto de la crianza se ha enfatizado con el tiempo y especialmente durante el confinamiento y ahora el periodo vacacional
Por Stephany Armas
Cuando se habla de la violencia en el hogar generalmente nos referimos a toda clase de situaciones que, valiéndose del poder, permiten que una persona haga algo efectivamente en grado de amenaza en contra de otra para causar daños o satisfacer de cierta manera su voluntad.
El psicólogo y coordinador del servicio de atención psicológica de Cecodap, Abel Saraiba, definió en el Forochat organizado por El Pitazo, este jueves 6 de agosto, que en ese proceso de violencia familiar se produce una serie de secuelas, inmediatas, mediatas y posteriores a la ocurrencia de la acción violenta que dejaran heridas en la víctima. Además, confirmó que cuando se viven situaciones difíciles estas marcan la vida de manera tal que la víctima no será la misma que antes de ocurrir esos hechos.
Sabemos que la violencia está presente en múltiples espacios y dentro de ellos está la familia, pero, ¿cómo podemos identificar la violencia familiar?
Aunque parezca fácil existen algunas formas y situaciones de violencia que pasan desapercibidas. El experto destacó que la violencia familiar no se limita solamente a la agresión física que parece evidente cuando se habla de la familia. Existe mediante insultos y tratos que hacen perder la confianza. Estas acciones pueden manifestarse de cualquier miembro de la familia, sin embargo, Saraiba afirmó que mayormente son personas que tienen algún grado de poder dentro del hogar.
Las situaciones de violencia pueden pasar a otro nivel
El invitado indicó a los lectores de El Pitazo que el castigo físico contra los niños es una de las situaciones naturalizadas por las personas, pues lo observan como una forma de castigo en modo de dolor para que el otro cambie su comportamiento.
– Advertisement –
El psicólogo resaltó que estas acciones violentas están relacionadas con la manera en que los padres controlan su nivel de estrés, problemas y ansiedad. Por otra parte, el castigo físico no es efectivo. “Siempre hay que pensar cuáles son las consecuencias de pegarle a un niño, niña o adolescente”, afirmó Saraiba.
Por otra parte, el psicólogo explicó que el niño que es criado bajo la violencia no reconocerá con facilidad cuándo esta violencia comience a afectar su vida.
“Al niño que se le pega en el hogar se le está enseñando que utilizar la violencia es la manera de resolver los conflictos”, comentó.
Los niños, niñas y adolescentes que viven bajo actos violentos en el hogar pueden presentar y producir distintas manifestaciones y comportamientos como mayor nivel de irritabilidad, más intranquilidad, señales de ansiedad. Estas conductas anormales pueden provocar alteraciones del estado de ánimo y desembocar en trastornos severos, incluso actos que pueden ponerle fin a sus vidas.
“Muchos padres utilizan la violencia como forma de crianza, no con la intención de causar daños sino de corregir. Pero lo realizan sin saber el impacto negativo que genera la violencia en la crianza de los niños, que puede causar hasta la muerte”.
El equipo de Atención Psicológica de Cecodap dice que Latinoamérica tiene la tasa más alta en este tipo de violencia: entre 9,5% y 12,5% de las víctimas de suicidios son infantes y adolescentes, y la situación en los hogares venezolanos se agrava de manera alarmante desde el comienzo de la cuarentena, sin embargo, al abrir la ronda de preguntas del Forochat, el especialista realizó una serie de recomendaciones a los lectores de El Pitazo para afrontar la situación.
¿Cómo los padres pueden hacerlo diferente?
¿Qué tipo de relación quieren tener los padres con el niño? Hacer que el niño se sienta seguro, colocarse en los zapatos del niño y brindarle información para resolver la situación que se presenta son las herramientas fundamentales que brinda el equipo de Cecodap para situaciones relacionadas con el tema.
Una de las preguntas más recurrentes durante el Forochat fue: «¿Qué pasa cuando somos testigos de la violencia?». El experto afirmó que si una persona está percibiendo que existe una situación de violencia constante contra un niño debe denunciar lo más pronto posible dicho acto. Saraiba explicó que para formular una denuncia no se necesitan informes, fotografías o videos; y que las alternativas para la acusación son la policía municipal, el concejo de protección y la fiscalía general de la República.
«Si un padre, madre o cuidador se niega a recibir apoyo para cesar las acciones violentas, ¿qué se debe hacer?» Desde Cecodap recomiendan que la primera vía de solución sea desde la reflexión y conciliación, pero si el agresor no permite resolver la situación por ese canal, las personas deben acudir al consejo de protección, donde pueden dictar una medida que obliga al individuo a buscar la ayuda necesaria tanto para el padre, como para el niño.
Una lectora de El Pitazo preguntó: «Tengo una hermana violenta. No quiere ir al médico, nos agrede y nos amenaza con cuchillos. ¿Qué hago?».
En este caso particular, en el que la vida de varias personas es amenazada con armas, es necesario que los familiares tomen acciones de inmediato. El canal más efectivo y rápido es comunicarse con la policía municipal y conversar el caso. “La denuncia siempre es el primer paso, posteriormente ubicar estrategias de abordaje que permitan bajar los niveles de tensión en el núcleo familiar”, recomendó Saraiba.
Comentarios recientes